¿Podemos detectar el inicio de una demencia?
- May 30, 2023
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Envejecimiento exitoso – Envejecimiento sano – Deterioro cognitivo leve – Demencia. El envejecimiento exitoso implica un rendimiento intelectual superior en edades avanzadas, desafiando las expectativas. Aunque es común acumular pequeños déficits con la edad, las capacidades adquiridas se mantienen. El deterioro cognitivo leve, precursor de la demencia, plantea interrogantes sobre el envejecimiento y la progresión de enfermedades neurodegenerativas.
El envejecimiento exitoso: Superando las expectativas en la vejez
El envejecimiento exitoso entendido como un rendimiento intelectual superior en edades avanzadas ha capturado nuestra atención a lo largo de los años. Nos viene a la mente el nombre de médicos, científicos o artistas que, en su etapa tardía de la vida, muestran capacidades intelectuales por encima de la media. Este fenómeno desafía las expectativas y nos lleva a preguntarnos sobre los factores que contribuyen a este envejecimiento exitoso.
El envejecimiento sano: Manteniendo capacidades mientras se acumulan déficits
La mayoría de las personas experimentan un envejecimiento sano, donde los cambios cognitivos son principalmente cuantitativos. A medida que envejecemos, es normal que se acumulen pequeños déficits, como una mayor lentitud en el procesamiento de la información, dificultad para mantener la atención y problemas para recordar o aprender nuevos movimientos. Sin embargo, en general, los conocimientos generales, el lenguaje y el vocabulario se mantienen intactos.
El deterioro cognitivo leve: Un precursor de la demencia en la vejez
El deterioro cognitivo leve (MCI) se refiere a las alteraciones cognitivas evidenciadas en una evaluación clínica, que no cumplen los criterios para un diagnóstico de demencia. Estas alteraciones pueden manifestarse a través de quejas de memoria o dificultades en la ejecución de acciones, el cálculo y la atención. Aunque las personas con un envejecimiento sano también pueden experimentar déficits leves, la diferencia radica en que estos cambios no progresan significativamente con el tiempo y no afectan de manera funcional a la persona. Sin embargo, se ha observado que el deterioro cognitivo leve puede ser un precursor de la demencia, con una tasa de progresión más alta en comparación con la población cognitivamente sana.